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TRUCOS ÚTILES

Evita que tu consola se estropee con estos simples trucos

Os contamos varios consejos para evitar que vuestra consola se estropee con el uso, la humedad o el paso del tiempo.

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Mantener tu consola cuidada es importante si quieres que esta dure muchos años, incluso toda tu vida. En primer lugar, no os vamos a engañar: todas las consolas tienen una fecha de caducidad, pero también es cosa de los jugadores preocuparse de que estas aguanten más o menos tiempo. Además, también está el hecho de que hay máquinas defectuosas o que se estropean sin mayor motivo. Esto debemos asumirlo como una posibilidad.

Ahora bien, aquí estamos para ayudaros en el cuidado de la máquina y evitar que esta acabe estropeándose en los próximos meses o años. A continuación os contamos una serie de trucos que podrán alargar la vida de tu consola.

Las lluvias dejan 62 litros en Ciudad Real
Las lluvias dejan 62 litros en Ciudad Real | OC

Fuera humedad

Uno de los consejos más importantes a tener en cuenta es evitar que la consola coja humedad en nuestra casa. Si vivís en una zona con mucha humedad, no olvidéis pasar el deshumidificador cada poco tiempo. Igualmente, si tenemos la posibilidad, es aconsejable que la consola la coloquemos en una sala en donde no haya humedad.

Un termómetro marca 47 grados en Córdoba
Un termómetro marca 47 grados en Córdoba | EFE

El calor tampoco es bueno

Si la humedad puede estropear una máquina con facilidad, el calor también puede ser muy peligroso para una consola. Debemos evitar que la consola alcance temperaturas muy elevadas. Si hace mucho calor, lo mejor es no jugar para que esta no se queme. Hay consolas que se calientan más que otras, por lo que es aconsejable comprobar que la nuestra no se calienta mucho al jugar. Lo ideal es tener nuestra máquina en un lugar con cierta ventilación para evitar el sobrecalentamiento.

Soplando polvo
Soplando polvo | Archivo

Pasar el polvo

Una consola tiene puede llegar a estropearse si no le pasamos el polvo. En esto hay varias soluciones plausibles: bien podemos limpiar la consola (superficialmente) de forma regular, lo cual siempre es aconsejable, pero también podemos cubrir la máquina con un pañuelo o trapo cuando no la usamos. Así evitamos que el polvo acabe depositándose en la consola y sus rejillas de ventilación.

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