Con estos trucos podrás defenderte del calor fácilmente

El calor del verano es en muchos lugares insoportables y aunque en la península existen algunos lugares en donde puede llegar a ser agobiante, lo cierto es que vivimos en un clima bastante templado en el que durante todo el año disfrutamos de temperaturas habitualmente suaves. En otros lugares del mundo el calor es aún más insoportable, especialmente si lo juntamos con altas dosis de humedad, motivo por el que visitar Japón en pleno verano no es agradable para muchas personas.

En las latitudes en las que está situada España o Japón, por ejemplo, el mes más complicado con respecto al calor suele ser agosto, especialmente en las islas más al sur, en donde existe un clima subtropical. Por ello, muchos nipones son expertos en contrarrestar el intenso calor del verano y algunos de sus trucos pueden servirnos a nosotros para pasar los peores días

Toalla tenugui

Es uno de los trucos más habituales de los nipones para sobreponerse de los días más calurosos, una toalla. Esta toalla rectangular pequeña la venden en todos lados en Japón y su uso es muy sencillo. Tan solo hay que mojarla en agua fría, escurrirla y ponerla alrededor del cuello mientras caminamos o realizamos otras tareas. El agua fría ayuda a bajar la temperatura en la zona del cuello, en donde hay concentración de receptores de temperatura de la piel.

Protegerse la cabeza y la piel

En Japón tienen muy clara la necesidad de protegerse la piel y la cabeza para evitar quemaduras, algo que aumentará mucho la sensación de malestar y calor. En primer lugar, usan mucho toallitas y spray refrescantes cuyo objetivo es limpiar el sudor y añadir un toque refrescante. También se cubren siempre la cabeza con gorras o parasoles, y nunca se olvidan de protegerse la piel con cremas solares.

Los hiyaron

En Japón tienen productos para todo y muchos se pueden importar en diferentes tiendas online. En invierno, cuando hace frío, tienen unas bolsitas conocidas como “kairo” que al golpearlas comienza una reacción que produce calor durante una hora aproximadamente, colocándose dentro de la ropa para calentarse. La versión de estas bolsas para el verano se conocen como “hiyaron”, y la reacción en este caso produce frío durante media hora. Suelen refrescar con ellas zonas como la nuca o la frente.

Baño de pies

Al igual que el cuello es una zona sensible al calor, los pies también lo son. Por ello cuando tienes frío en invierno, poner los pies en agua caliente ayuda a subir la temperatura del cuerpo. Lo mismo pasa con el frío y lo mejor es llegar a casa después de un caluroso día y mojar los pies en agua fría. Los pies tienen muchos vasos sanguíneos, así que enfriarlos nos ayudará a enfriar el resto del cuerpo. Una especie de disipador del cuerpo...