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Análisis: Call of Duty: Infinite Warfare, diversión conservadora pero peligrosa
Infinity Ward era el estudio encargado de pasar este año por la franquicia y cuyos resultados ofrecen varios claroscuros.
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Campaña imponente y con fuerza
Ahora sí podemos gritarlo: ¡Por fín Call of Duty ofrece una Campaña redonda y muy variada! Tras varias entregas en las que la franquicia y los diferentes estudios parecían no encontrar el punto al modo para un jugador, Infinite Warfare ofrece todos esos cambios que demandaban los seguidores de esta vertiente.
La historia, ahora más adulta y cuyo comienzo es de los más fuertes que hemos visto en los últimos años, nos llevará a luchar arduamente contra un grupo de terroristas. Por supuesto, dicha Campaña no se quedará sólo en enfrentamientos en tierra, sino que Infinity Ward los lleva al espacio y todo tipo de planetas.
El ritmo está muy bien marcado, las diferentes misiones y sus objetivos, así como los encargos secundarios - una gran novedad para el título - se traduce en que la duración de la misma se vaya por encima de las 7 horas, toda una sorpresa en la franquicia.
El jugador exigente para la Campaña de todo Call of Duty que se precie puede estar tranquilo. La trama es interesante y engancha de principio a fin por planteamiento y personajes - tanto aliados como secundarios -. El desarrollo de misiones es divertido con todo tipo de situaciones en las que, como no podía ser de otra manera, la espectacularidad está al servicio del usuario.
Multijugador: Una de cal y otra de arena
Mientras que la Campaña ha sabido sorprendernos e incluso incitarnos a rejugarla, el online nos ha dejado un sabor agridulce. La ambientación futurista utilizada para Infinite Warfare puede que haya sido el principal elemento que ha provocado en nosotros la sensación de “esto ya lo he jugado antes”.
Bien es cierto que ahora es mucho más frenético en su jugabilidad o que incluso la personalización de las armas ha sido llevado un paso más allá; pero el salto jugable es apenas nulo, hecho que puede repercutir negativamente en todos aquellos jugadores que anualmente pasen por la franquicia.
Se mantienen inalterados los elementos que hacen de Call of Duty un auténtico “come-horas”: Partidas cortas, vibrantes y en las que los constantes premios en forma de nuevas armas y desbloqueos hacen que siempre digamos la clásica frase de “una más y lo dejo”. Y sí, es una pena aunque se mantengan los elementos clásicos desde hace años en la IP, Infinity Ward - y responsables de algunas de las mejores entregas de la saga - no hayan querido ir un paso más allá y tirar de ambición.
Los jetpacks, los escenarios reducidos o la ausencia de carisma por parte de algunas de los elementos escogidos - como las clases - hacen que este Call of Duty: Infinite Warfare parezca un híbrido entre Advanced Warfare y Black Ops 3.
¿Dejaste abandonada la saga? Infinite Warfare es una opción muy completa
Como decíamos líneas atrás, puede que los usuarios que año tras año han pasado por Call of Duty sean los menos reacios a la adquisición de Infinite Warfare, en especial si tenemos en cuenta el parecido con las dos últimas entregas de la franquicia.
No obstante, y más allá de criticar el que pudiera ser una falta de ambición por parte de Infinity Ward o su parecido jugable con Advanced Warfare; lo nuevo de Activision para Xbox One, PlayStation 4 y PC puede convertirse en la opción ideal para los usuarios que, tras dejar por cuenta propia la saga, quieran volver a ella.
Los motivos sobran. Por un lado tenemos un nuevo episodio en la IP, Call of Duty: Infinite Warfare, que viene cargado con una Campaña muy interesante, completa y dinámica; ese giro que necesitaba dicha vertiente. Por otra parte, el multijugador engancha, y aunque no destile personalidad - si ya hemos probado Black Ops 3 y Advanced Warfare - el jugador que no ha pasado por los mencionados títulos disfrutará como un niño con el equipo a desbloquear y el frenesí de las partidas. Sumad a todo ello además un modo Zombies que, como cada año, no defrauda, ahora tirando de humor ambientado en los años 80.
Aquí no terminan las bondades de Infinity Ward, pues el estudio ofrece en un pack nada más y nada menos que Call of Duty: Modern Warfare Remastered; la versión actualizada a la fecha de uno de los juegos más queridos de la marca. ¿Se puede pedir más?
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