Quantum Break: El poder de controlar el tiempo

Jack Joyce es el protagonista de una historia en la que, a través de brechas espacio-temporales, deberemos acabar con la autoridad de Monarch. Tras un experimento fallido, la sociedad quedará dividida - tomando nosotros parte de cierta decisiones - entre los que apoyan el uso de todo tipo de pruebas para controlar el tiempo, y los que no. Cada uno de los diferentes actos del título quedan acompañados por numerosas secuencias cinemáticas que, al más puro estilo serie de TV, sirven para narrar cada uno de los acontecimientos que se suceden.

Quantum Break vuelve a marcar el estilo que ya definiera Remedy con 'Alan Wake'. Escenarios lineales, intercalando zonas estrechas para ahondar en la trama y conocer a los personajes, así como otras ligeramente más amplias en las que tienen cabida puzzles y por supuesto enfrentamientos. En este aspecto, Quantum Break destaca por el uso de una amplia variedad de poderes con los que controlar el tiempo. Ya sea ralentizando la acción durante unos segundos, transportándonos varios metros por delante o creando una burbuja protectora; el control es fluido e invita a realizar todo tipo de combinaciones con los poderes. Las armas de fuego, también presentes, quedan en un segundo plano durante los combates, aunque su uso por supuesto también será de gran utilidad.

En el apartado gráfico, y a pesar de la polémica generada en torno a la resolución, 'Quantum Break' luce francamente espectacular. Los efectos de partículas y la destrucción del escenario son más que notables, llevándose sin lugar a dudas el gran protagonismo las animaciones faciales y la iluminación. Referente al sonido, el título cuenta con una muy bien escogida banda sonora con tintes electrónicos, y las voces originales de los actores que prestan su rostro para los personajes.

Puede que no sea el título más original hasta la fecha en términos jugables, o que en ocasiones la acción quede mermada por tediosas fases lineales, pero no cabe duda de que Quantum Break sabrá mantener pegados a la pantalla a los fans de las aventuras cinematográficas. Remedy convence, aunque sin alardes, con su nuevo juego para Xbox One y Windows 10.