CONSEJO ÚTIL
Trucos para que las mascotas no muerdan los cables de tu consola
Aunque en un primer momento esto nos puede hacer gracia, corremos el riesgo de que nuestro amigo felino pueda hacerse daño.
Muchos jugadores comparten su afición por los videojuegos con su afición por los animales. Y no, no estamos hablando de videojuegos en el que tenemos que cuidar a mascotas virtuales. Si eres de las personas que cuenta con una mascota en casa, ya sea un gato o un perro, sabrás que en algunas ocasiones tener una maraña de cables puede ser un problema. Esto aun se acentúa más con los gatos, ya que si estos cuelgan y se mueven, no pueden evitar arañarlos o morderlos.
Aunque en un primer momento esto nos puede hacer gracia, corremos el riesgo de que el cable se estropee o, lo que aún es peor, que nuestro amigo felino pueda hacerse daño si muerde un cable con mucha electricidad. Hacerle entender a un gato que no puede morder los cables puede ser un tanto difícil, sobre todo si no podemos estar todo el día encima de él, por lo que existen trucos que podemos utilizar para evitar esto.
La clave de todo esto es la precaución. Lo primero que has de hacer es identificar los puntos de tu casa en donde haya cables eléctricos que tu gato puede morder. Pero no lo hagas a la vista de un humano. Date cuenta de que los gatos son muy bajitos, y lo primero que le va a llamar la atención son los cables que se mueven a su altura. Además, estos animales son muy saltarines y les gusta mirar la estancia desde las alturas si pueden. Por lo tanto, también debes tener en cuenta los cables que pueden verse desde, por ejemplo, la mesa del escritorio.
Cables del ordenador, Internet, antena, impresora... Estos suelen ser los cables que más a la vista están en nuestros hogares para un gato. Dependiendo de como tengas colocado el salón: los cables de la televisión, el reproductor blu-ray o la consola, estas también pueden ser zonas peligrosas para nuestro minino. Como es normal, si hay aparatos que no uses de forma habitual, mejor guardarlos porque evitaremos la tentación de nuestro gato.
Para finalizar, existen en el mercado una amplia gama de aerosoles que pueden rociarse por el cable para que nuestro gato, al olerlo, se aleje de él. Sin embargo, podemos conseguir el mismo efecto con productos cotidianos de casa. Lo primero que has de hacer es desenchufar el cable y, con la ayuda de un algodón, impregnado con alguno de estos productos: zumo cítrico, vinagre o pimienta. Déjalo secar antes de volver a conectarlos. No uses nada que sea salado, porque atraerá a tu felino.