5 motivos por los que el nuevo Call of Duty será un pelotazo

Call of Duty es una de esas franquicias que bien ha sido catalogada por muchos como la gallina de los huevos de oro. Una marca explotada año a año, unas veces con ideas buenas y otras no tanto. Desde sus inicios, compitiendo y mirando de tú a tú a Medal of Honor, Activision fue capaz de granjearse a los usuarios con las historias de soldados en la 2º Guerra Mundial y que tenían lugar en frentes como el ruso, americano o británico.

Con el paso de los años y las mejoras gráficas que brindaban plataformas como Xbox 360 y PlayStation 3, los responsables originales de la marca fueron un paso más allá trayendo consigo Call of Duty: Modern Warfare. Un auténtico superventas que se granjeó no sólo el beneplácito de crítica y público por su Campaña una vez más, sino por su adictivo multijugador.

A partir de ahí, el resto es historia. Call of Duty se convirtió oficialmente en la franquicia más potente de la industria, generando millones de dólares a su paso y dando motivos para ser el único juego que estuviera instalado en nuestra consola hasta la siguiente entrega de la marca. Esa “avaricia” por parte de Activision provocó cierta fragmentación en los estudios que trabajaban para la marca, perdiendo ideas original por el camino e incluso los creativos que originalmente habían dado vida al shooter que fue capaz de llevar la experiencia multijugador a consolas de la misma forma que hacía una década atrás Valve con Counter Strike en PC.

Pasamos por la 2º Guerra Mundial, viajamos hasta Vietnam y de ahí al futuro. Ésta última ha sido el marco que ha protagonizado las más recientes entregas de la saga, pero también la que ha hecho cambiar de bando a más de unos cuantos jugadores. Ya sea agotamiento o la ausencia total de la esencia a la que nos tenían acostumbrados, los usuarios desean volver a engancharse a Call of Duty.

Dice el refrán que a veces para avanzar es bueno retroceder. Activision se habría tomado al pie de la letra el dicho, tanto es así que las más recientes información sitúan al Call of Duty de 2017 en la 2º Guerra Mundial. ¿Motivos para confiar? Desde luego que sí. Os contamos los motivos que, a nuestro juicio, nos hacen imaginar el retorno del rey a PlayStation y Xbox.

Menos jetpack, más habilidad

El que las ambientaciones anteriores estuvieran protagonizadas por jetpacks, saltos imposibles o la capacidad de recorrer las paredes lo hacía más espectacular, pero no por ello mejor. El jugador de Call of Duty demanda poder demostrar su habilidad al gamepad, nada mejor que poner un arma clásica como la MP40 alemana o la Thompson americana para ello. Sin trampas ni cartón, sólo un arma y un soldado en el campo de batalla.

El regreso de una gran campaña

Si nos atenemos a la rotación de estudios que pasan por Call of Duty año a año, Sledgehammer serían los encargados de este nuevo episodios. De ellos tuvimos Advanced Warfare, para nada un mal título y más concretamente en su Campaña, tal vez la mejor en los últimos años. Las imágenes filtradas hablan de una visita a la playa de Omaha con el desembarco de Normandía. Mejor marco imposible para imaginar una historia que nos haría vibrar desde el primer momento, ¿verdad?

Personalización, pero sin excesos

Uno de los principales motivos por los que los usuarios continúan jugando a Call of Duty es la posibilidad de desbloquear todo tipo de armamento y características para su personaje. Si atendemos a que este nuevo capítulo de la marca tendría a la 2º Guerra Mundial como telón de fondo, el que podamos personalizar a nuestro soldado es una opción viable, pero sin excesos. Las armas no sólo deberían de seguir el rigor histórico, sino que además debería de aplicarse el mismo patrón para la estética del héroe.

Realismo total vs Control Arcade

Qué prefiere el jugador de Call of Duty: ¿un control más arcade y fácil de controlar o por el contrario uno en el que se tengan más en cuenta el retroceso del propio arma? La 2º Guerra Mundial fue una época en la que la tecnología militar avanzó a pasos agigantados si la comparamos con la Gran Guerra. Las armas eran todavía más mortíferas, pero igualmente algo austeras incluso para el más preparado de los ejércitos. En manos de Sledgehammer está ofrecer una experiencia arcade o con ciertos toques de realismo.

La siempre polémica decisión de las rachas de bajas

Seamos sinceros, la mejor manera de demostrar nuestra habilidad en Call of Duty es lanzando el elemento posterior a la racha de bajas de turno. Durante los diferentes episodios de la franquicia hemos visto de todo, pero ahora lanzamos la pregunta: ¿qué introducirá Activision para este nuevo episodio? Es ilógico pensar que mientras estamos en Omaha Beach, por ejemplo, podamos lanzar una bomba nuclear, ¿verdad? Las rachas de bajas son la clave para ofrecer un multijugador adictivo, pero también equilibrado.