UNA CONSOLA MUY QUERIDA
La Reina Isabel II era una fan declarada de Wii y tenía un juego como claro favorito
La Reina Isabel II, que aunque nunca fue jugadora declarada, sí que confesó ser una fiel seguidora de Wii y más concretamente un juego de su catálogo.
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El fallecimiento de la Reina Isabel II ocupa portadas de periódicos, comentarios en redes sociales y foros, además de por supuesto los próximos días en TV. El plena vorágine de información sobre la que fue durante 70 años Reina de Inglaterra, hay muchísimas anécdotas que no conocéis.
Una de ellas está vinculada con los videojuegos. Y es que si bien es cierto que la Reina Isabel II nunca fue fan declarada de este hobbie, sí que reconoció ser una jugadora asidua a Wii. La popular consola de Nintendo se convirtió en uno de los pasatiempos favoritos de la Reina de Inglaterra.
Tenemos que remontarnos hasta mediados del 2000, época en la que la GranN publicaba su flamante nueva consola, reventando el mercado entre los usuarios que nunca se habían acercado a una consola o habían dejado aparcado desde hace mucho tiempo este tipo de distracciones. Ellos fueron el principal pilar de Wii, motivo de su éxito y entre los que figuraba Isabel II.
Kate Middleton regaló al Príncipe Carlos una Wii por las Navidades de 2007. En poco tiempo las tardes y noches de palacio habían estado protagonizadas por la consola de Nintendo, siendo Isabel II una asidua a ellas. ¿Y cuál fue el juego que despertó un gran interés en la que fuera Reina de Inglaterra?
Pues nada más y nada menos que 'Wii Sports'. El videojuego de la consola fue un rotundo éxito, dejando decenas de millones de copias vendidas alrededor del mundo. De entre los diferentes minijuegos incluidos en el videojuego, los bolos fue sin lugar a dudas su favorito. Un videojuego que disfrutó durante años. La historia no tardó en darse a conocer y empresas como THQ tuvieron la idea de cubrir una Wii de 24 quilates y entregársela a la Reina Isabel II. Si bien no consiguieron su propósito, la consola terminó en manos de un coleccionista y más tarde una subasta.
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