ENGAÑO RENTABLE
Breakout: El engaño de Steve Jobs con el que fundó Apple
El famoso fundador de Apple tuvo su pequeño papel en la historia de los videojuegos, un papel que le serviría luego para llegar a la cima.
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Steve Jobs es conocido por todos por ser el fundador de Apple y el creador del iPhone. Pero en el pasado, el fallecido empresario también trabajó para una de las más grandes empresas de videojuegos: Atari. Jobs no contaba con los recursos económicos suficientes para crear su propia empresa, por lo que aceptó un trabajo para la compañía americana de videojuegos.
Atari había creado el prototipo de Breakout, un videojuego de recreativa en el que debemos romper varias filas de bloques de colores situados en la zona superior de la pantalla. El prototipo de Atari contaba con 100 chips, lo que suponía un gran gasto económico por máquina. Debido a ello, los americanos le pidieron a Steve Jobs un nuevo prototipo que utilizase muchos menos chips, prometiéndole 750 dólares por el trabajo y otros 100 por cada chip eliminado. Jobs aceptó el encargo, proponiéndose la meta de conseguirlo en 4 días, y pidió ayuda a Steve Wozniak, un gran amigo suyo.
Tras cuatro días prácticamente sin dormir, Wozniak terminó satisfactoriamente el diseño de Breakout, consiguiendo reducir el número de chips a 42. Sin embargo, Steve Jobs se llevaría gran parte de los beneficios, pues solo le había prometido 375 dólares a Wozniak, ocultándole el beneficio extra por cada chip eliminado. Finalmente Atari no pudo emplear el prototipo creado por Jobs y Wozniak. Sin embargo, gracias a esto Steve Jobs pudo fundar Apple, empresa que con el tiempo llevaría al estrellazgo.
Apple, la negativa a los botones
Hasta los últimos años, Apple nunca se había introducido demasiado en el sector de los videojuegos de forma directa. En su eterna batalla con Microsoft, los de "la gran manzana" no han podido aspirar a quedarse con la gran mayoría de videojuegos que acababan siendo adaptados a Windows, y es que aún ahora se hace bastante extraño ver videojuegos compatibles con Mac OS, para que más exclusivos.
En cuanto a consolas, Apple apenas lo intentó con una máquina llamada Apple Pippin, lanzada en el año 1997, un año muy difícil tras la salida de la primera PlayStation y Nintendo 64. La consola de Apple apenas logró vender 42.000 unidades frente a las decenas de millones que vendían la competencia. Para más dificultad, Apple renegó de los botones con su primer iPhone, demostrando que una pantalla táctil podía aunar todas las facilidades necesarias en un dispositivo móvil. Pero los botones son muy importantes en los videojuegos, pues aportan un control muy preciso.
Esto ha terminado por crear una brecha entre consolas portátiles y dispositivos móviles, pues para jugar a videojuegos los jugadores siguen prefiriendo consolas tradicionales. Esto sin embargo, no ha impedido lanzar videojuegos para iPhone. De hecho, actualmente las ganancias de Apple con sus plataformas iTunes y App Store son millonarias en cuanto a venta de videojuegos se refiere. Centenares de millones de usuarios disponen de un iPhone, lo cual supone unas enormes ganancias a la hora de vender videojuegos para móviles, en donde Apple se queda con un porcentaje cercano al 30% de los beneficios generados en sus tiendas virtuales.
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