¿Te acuerdas de PSP? La jugarreta de Sony para vender su portátil

El año 2005 fue uno de los más interesantes para la industria del videojuego. En el mercado de las sobremesa teníamos la nueva y flamante Xbox 360, una de las consolas más destacadas de la pasada generación. En el horizonte se dibujaban PlayStation 3 y Wii, ésta última siendo una de las máquinas de mayor éxito de la historia de los videojuegos. En las portátiles por su parte destacarían sin lugar a dudas Nintendo DS y PSP.

La portátil de Nintendo fue una de las consolas más deseadas, siempre lo ha hecho cada nueva portátil por parte de la compañía japonesa. Por parte de Sony teníamos su primera consola de bolsillo, puede que motivos más que suficientes tras ver el éxito de PlayStation 2, pero no pudieron luchar con la aclamación popular de DS.

Brain Training, nuevos videojuegos de Pokémon o Mario Kart eran algunas de las franquicias contra las que debía enfrentarse Sony. Para encarrilar las ventas de PSP, desde la empresa nipona idearon una agresiva campaña de marketing que será recordada en la industria por la peculiar manera en la que se llevó a cabo.

No hablamos precisamente de los correspondientes anuncios para revistas o TV, que también se hicieron, por supuesto. En este caso Sony optó por pintar diferentes graffitis de ciudades tan dispares como Philadelphia o Nueva York, entre otras, con jóvenes que aparecían jugando a la citada PSP.

Los habitantes de las diferentes ciudades no tardaron en quejarse de las pintadas, en especial debido a que muchas de ellas rozaban los obsceno más que el llamamiento a comprar la portátil. Además de las consiguientes demandas de los vecinos, el propio alcalde de Philadelphia estuvo tentado de llevar las pintadas ante Sony como denuncia criminal.

La compañía japonesa se defendió alegando que tenía el consentimiento de propietarios de edificios y del resto de edificios en los que aparecían los graffitis. Finalmente cedieron a la presión popular y no continuaron con la campaña. Durante este periodo de tiempo consiguieron que se hablara de PSP, sí, pero tal vez de una manera más que discutible. ¿Hubiérais empleado vosotros métodos similares para enfrentaros a la todopoderosa Nintendo DS?