Aparece por sorpresa el fantasma de la amante del marido de Hetty Woodstone y ambas terminan peleadas

Jay ha logrado sintonizar bien con un par de vecinas a las que les encanta la fiesta de Halloween. Para quedar bien junto a ellas, Jay les dice que en su mansión hay fantasmas y que pueden pasarse por casa durante la noche para hacer una sesión de espiritismo como nunca lo habían visto. Jay intenta convencer a Samantha para que le diga a los fantasmas que le ayuden a convertir esa sesión en algo sobrenatural y así sorprender a sus nuevas amigas.

El problema es que la sesión de espiritismo resulta un verdadero fiasco para los mortales, pero logra abrir un portal con el más allá del que baja un nuevo fantasma. Se trata de la amante de Elijah, el marido de lady Woodstone. Los problemas entre ambas no tardan en aparecer y se reprochan mutuamente lo sucedido en el pasado. Afortunadamente para ellas, allí está Samantha para explicarles que la culpa de todo no era de ellas, sino del propio marido de Hetty Woodstone.