La leyenda de Hanako-san: El fantasma de los baños japoneses

Las leyendas japonesas tienen la facultad única de provocar que incluso esos lugares que parecen más inocentes acaben siendo de lo más terrorífico. Si bien por una parte nos encontramos con criaturas que pueden llegar a estar presentes en las grietas de las casas, también hay opciones que son incluso más terroríficas como es el caso de Hanako-san, una de las leyendas más populares de Japón.

Hanako-san es una de las leyendas más conocidas debido a que nos cuenta la historia de la niña del baño, un fantasma que habita en el tercer cubículo del baño de las mujeres. Y aunque la leyenda cambia un poco, se menciona que puede tener dos opciones, aunque todas coinciden en que se trata de un espectro bastante juguetón ya que te concede o un deseo o, directamente la muerte. Sea cual sea la opción, siempre habrá un precio a pagar.

La historia de la niña del baño

Todas las historias coinciden al indicar que se trata de un espectro que se encuentra en el tercer o cuarto cubículo de los baños escolares para mujeres. En estos se encuentra Hanako esperando con un tétrico aspecto puesto que tiene el cabello largo y negro, lacio y, si bien algunos afirman que usa un traje escolar con una camisa blanca, otros la han señalado con un vestido blanco.

La mirada de Hanako es capaz de helar la sangre ya que es penetrante y fría. Quienes afirman que la han visto indican que, con su aparición, hay un gran hedor en el baño, con mucha humedad y hasta penumbra en el lugar. Por ello, es incluso más probable encontrarla en los baños de lugares abandonados o que no se han limpiado en mucho tiempo.

El origen de una terrible leyenda

Algo en lo que coinciden todas las versiones de esta leyenda es precisamente en el hecho de que aparece con intención de jugar para fastidiar, sobre todo a esas personas que están solas. Por ello, si te encuentras a solas y vas a dirigir tus pasos al baño, jamás debes entrar en la tercera o cuarta puerta ya que hay mucho riesgo de que ella aparezca. Sin embargo, otros afirman que hay ocasiones en las que esta simplemente está esperando a jugar sin necesidad de manifestarse en el lugar.

Su aparición es variada ya que puede ser llamada tocando varias veces a la puerta o, simplemente, mediante su imagen. Sin embargo, su origen es incierto. Hay leyendas que afirman que su historia se remonta a la Segunda Guerra Mundial, donde la joven se encontraba en la escuela, durante el recreo, cuando comenzó el bombardeo y ella tomó la decisión de ocultarse en el baño, muriendo durante el ataque enemigo.

Sin embargo, otros indican que se trata de una historia de abuso donde la niña, cansada de las burlas de sus compañeros de clase e incluso de su propio padre, decidió tirarse por la ventana. Y otra, incluso más trágica, indica que la joven vio a un hombre mirándola fijamente y, aunque trató de huir y esconderse en el tercer cubículo del baño, este la encontró y le atacó con un hacha, condenándola a atemorizar a los más inocentes y sin encontrar jamás la paz.