¿Por qué los estudiantes deben cortarse el pelo de una forma específica en Japón?

Es posible que en alguna ocasión, ya fuese por oídas o una lectura de algún artículo, te hayas encontrado con algunas de las singulares normas japonesas para sus estudiantes. Si bien es cierto que cada escuela puede tener algún tipo de regla en particular, hay una serie de puntos que muchas de ellas comparten. Entre estas no solo se encuentran normas centradas en la forma de vestir de los estudiantes, sino también a la hora de cómo cortar su cabello.

Recientemente se ha dado a conocer que en las escuelas secundarias públicas de Tokio no se permiten determinados cortes de pelo. Uno de los mencionados cortes prohibidos es, descrito de manera simple, mantener el cabello corte a los lados y en la parte de atrás para dejar este largo en la parte superior. Un estilo que en Japón se hace conocer como “dos bloques”.

Pero, ¿cuál es el motivo de esta decisión? Ha sido durante la reunión de la Asamblea Metropolitana de Tokio cuando el asambleista Yuichi Ikegawa, miembro del Partido Comunista Japonés, ha cuestionado los motivos que llevan a esta decisión. Y si para nosotros llega a ser sorprendente, tal y como demuestra el propio Ikegawa, también es una sorpresa para los japoneses.

Fue el propio jefe de la Junta Metropolitana de Educación de Tokio, Yuji Fujita, quien decidió reponder a esta cuestión. Según parece, esto se limita a que este corte puede ser peligroso para los estudiantes dado que se han dado casos de estudiantes involucrados en incidentes o que se han visto involucrados en estos debido a su apariencia. Por esta razón se ha impuesto la normativa sobre el corte de pelo: manteniendo el objetivo de proteger a los estudiantes.

Esta respuesta ha dado lugar a todo tipo de reacciones, incluyendo la del propio Ikegawa quien mencionaba que duda que cuando un niño se mete en problemas, el resto crea que existe algún tipo de problema contra su peinado. Por supuesto, no han tardado en llegar comentarios de japoneses mediante las redes sociales señalando que la medida no tiene sentido o, incluso, que el peinado es una forma de expresión personal.