LUGAR PECULIAR
Vivir como un ninja: este edificio de 100 años guarda todo tipo de secretos
Los amantes de los ninja tienen en esta casa una de las mejores experiencias que se pueden vivir hoy en día en Japón.
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Los ninja son, con diferencia, uno de los dos tipos de guerreros más conocidos de la historia japonesa. El otro símbolo de la época feudal nipona son los samurái, pero su estilo era completamente diferente. Mientras que el samurái atacaba siempre de frente y con un código de honor muy específico, los ninja eran en su mayoría asesinos en la sombra, capaces de realizar técnicas traicioneras para ganar el combate. Infiltraciones, explosiones, venenos, armas ocultas, etc.
Existen dos o tres puntos clásicos de Japón en donde se encontraban las principales familias ninja, uno de ellos es Iga, en la Prefectura de Mie. Es en esta prefectura en donde se encuentra el edificio que hoy os queremos mostrar, el Iga no Kura, traducido como Iga Storehouse. No se trata de un edificio nuevo, de hecho, tiene actualmente más de 100 años: su construcción data de 1918. Es uno de esos lugares raros e inusuales para pasar la noche en Japón.
Como hemos avanzado, Iga es conocida en todo el país y en el mundo entero por ser una de las cunas del arte del ninjutsu, siendo actualmente una característica explotado por el gobierno y los comerciantes de la ciudad para promocionarla. Si ya el aspecto exterior del edificio es curioso y tiene un cierto halo de misterio, dentro del mismo se conserva ese aire tradicional pero renovado, conteniendo gran cantidad de secretos.
Los visitantes podrán ver (si las encuentran) puertas secretas y escondites ocultos, lugares en donde un ninja acecharía a sus víctimas y enemigos. Lo que hace que la residencia sea especialmente atractiva es el hecho de que no solo está abierta a los visitantes, como ocurre con muchos edificios históricos y museos sobre los ninja de la ciudad, sino que también la gente puede pasar la noche aquí en una de sus dos habitaciones principales.
No esperéis todo lujo de comodidades, se trata de una experiencia tradicional. Un futón sobre los clásicos paneles de tatami, tal y como se dormía tradicionalmente en el país. Por supuesto, se puede alquilar toda la casa para grupos de viajeros, lo que la hace perfecta para explorar con los amigos. Pero sí existen algunas moderneces en este local: baños modernos, microondas para los invitados y una colección de más de 1.000 tomos manga.
Todo el edificio puede alquilarse por unos 23.000 yenes la noche, algo más de 200 euros. Sin duda una experiencia interesante cuando la normalidad vuelva a nuestras vidas y el Covid sea algo del pasado...
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