Una conocida cadena crea esmalte con sabor a pollo para, literalmente, chuparse los dedos

En el mundo existen muchas cadenas de comida rápida pero, si hablamos de Japón y hablamos de pollo, sin duda la que procede de Kentucky es la más famosa de todas. Gracias a al pollo frito que ofrece este tipo de restaurantes su popularidad ha ido creciendo con los años, lo que ha provocado que podamos encontrar un restaurante de la licencia en ciudades de todo el mundo. Incluso en Japón es una tradición navideña visitarlo y comer pollo frito con amigos y familiares.

Aunque ya sabemos que en este tipo de restaurante el secreto de la comida se guarda bajo llave, y más el de este pollo, en la actualidad podemos encontrar un producto que nos permite degustar su sabor en cualquier lugar en el que nos encontremos. Un marca de esmaltes ha desarrollado junto a la empresa McCormick, proveedor oficial de especias para KFC, una serie de productos que reproducen los populares sabores del pollo de la cadena: original y picante.

Este tipo de esmaltes funcionan exactamente como los esmaltes habituales, pero con la particularidad de que una vez seco se puede lamer para poder así disfrutar del característico sabor del pollo de KFC. Para su lanzamiento se creó toda una campaña publicitaria bajo el lema “It’s Finger Lickin’ Good”, lo que se traduciría como "Bueno para chuparse los dedos".

La noticia de que estos esmaltes iban a salir al mercado japonés fue tomada como una broma por gran parte de la sociedad, sin embargo, tiempo después fueron conscientes de que era realidad. En un principio se sacaron al mercado esmaltes con los dos sabores antes mencionados, pero esto era solo una prueba para conocer cuál de los dos gustaba más a la gente, para luego sacarlos al mercado en masa en su versión más exitosa.