Crean una actividad extraescolar para que los niños mejoren con los videojuegos

En el competitivo sistema educativo nipón, las actividades extraescolares son muy habituales, diversas y seleccionadas por muchos estudiantes para seguir con sus estudios, conocer personas nuevas y ahondar en aficiones de todo tipo. Por ello se crean actividades extraescolares oficiales y otras gestionadas por los propios alumnos, como clubs de lectura, de anime, de música, etc.

Muchos estudiantes también tienen tutores personales, llamados katei kyoshi en japonés. Gemutore es una nueva empresa que se encarga de realizar diferentes tipos de tutorías para alumnos de secundaria en el país pero, en lugar de enseñar a los alumnos cómo resolver problemas, con su curso les ayudará a mejorar en los videojuegos.

Como hemos dicho, las actividades extraescolares en el país del sol naciente no siempre están relacionadas con los propios estudios, también con la música, el deporte o las aficiones. Sin embargo, las clases de Gemutore no están diseñadas para niños que quieren convertirse en jugadores de eSports, ahora que los deportes electrónicos están creciendo en popularidad. Su objetivo es muy diferente y no le preocupa si alguno de sus estudiantes alguna vez se vuelve profesionales.

El objetivo de Gemutore es ofrecer el servicio como un "naraigoto", un término nipón utilizado para describir actividades educativas extracurriculares basadas en la adquisición de diferentes habilidades. Estudios recientes han demostrado que un buen uso de los videojuegos ayuda a desarrollar el procesamiento de la información en nuestro cerebro, ayuda al pensamiento crítico y a la toma de decisiones, igual que lo hacen otros juegos como el ajedrez.

Gemutore quiere potenciar todas estas habilidades de los estudiantes por medio de los videojuegos, uno de los productos de entretenimiento más habituales entre los jóvenes. El verdadero objetivo es agudizar las mentes de los estudiantes y sus habilidades de comunicación. Las lecciones de una hora se imparten en grupo (normalmente los sábados y los domingos), con un instructor y dos o tres estudiantes.