COSTUMBRE JAPONESA
El arte de las reverencias en Japón: ¿sabías que existe una para cada cosa?
Te explicamos algunos de los conceptos más sorprendentes y peculiares de la reverencia japonesa que no todos conocen.
Uno de los gestos nipones que más hemos visto en series, películas o videojuegos, es sin duda la clásica reverencia. Lo hemos visto principalmente en productos venidos del país del sol naciente, en licencias en donde se trata la sociedad nipona: la franquicia Yakuza, Shenmue, Sekiro, etc. Lo que muchos no saben es que la reverencia japonesa es, en realidad, mucho más complicada de lo que aparenta.
Detrás de este gesto de respeto, en realidad, existe todo un protocolo que requiere de una cierta comprensión. Dependiendo del lugar, la situación y el interlocutor que tengamos delante, debemos variar la reverencia japonesa. Hacerla más o menos evidente, ya que con ella también describes el rango de la persona a quien se la haces. Vamos a verlo con algunos ejemplos.
Inclinar la cabeza
En algunos casos el gesto de la reverencia se transforma en un leve gesto hecho simplemente con la cabeza. Una inclinación leve y rápida, casi como afirmando algo. Esta forma abreviada de la reverencia sólo la utilizan entre amigos o personas muy cercanas y, por supuesto, entre iguales. Es lo que podemos comparar a un abrazo en nuestro país.
Reverencia de 10 a 15 grados
Una inclinación leve del cuerpo, de entre 10 y 15 grados, ya es un gesto mucho más formal. Se trata de un saludo, igual que el gesto anterior con la cabeza, pero se utiliza entre desconocidos o entre personas que no se conocen, las cuales tienen más o menos el mismo rango.
Reverencia de 25 a 30 grados
Esta es la más estándar y es una forma de saludo pero, a la vez, denota respeto hacia la otra persona. Es un saludo pero no entre iguales; por ejemplo, es el gesto que ellos harían al presentarse a una entrevista de trabajo, en donde debes de ser extremadamente cortés. La formalidad es importante en esta reverencia.
Reverencia de 40 a 45 grados
Ojo con esta reverencia ya que, si la ves, la persona a quien se la hagan es muy importante por algún motivo. Esta está reservada para gente tan importante como el Emperador de Japón, el Presidente o ministros, el jefazo de una gran multinacional en caso de que seas un empleado, etc. Sólo cuando la persona que tengamos delante sea extremadamente importante. También es la utilizada para pedir disculpas por algún error que se haya realizado.
En ocasiones este gesto, especialmente al pedir disculpas por un error muy grave, se exagera de tal manera que la persona que la hace termina de rodillas en el suelo. A este gesto se le conoce como dogeza, y muestra una clara sumisión.