PlayStation 5: ¿una nueva consola completamente diferente al resto?

PlayStation 5. Su nombre asusta a algunos jugadores, en especial a aquellos que ya se han hecho con PlayStation 4 recientemente o la versión mejorada de la misma, PlayStation 4 Pro. Por otra parte, también están los que miran con ilusión a una posible sucesora, sobretodo aquellos que buscan potencia bruta, fotorrealismo y quién sabe si alguna que otra sorpresa en la que Sony podría sorprender en lo que a diseño y estilo se refiere.

Es precisamente este punto, una forma completamente distinta de entender la que sería PlayStation 5, el apartado que más revuelo está creando en las comunidades de aficionados. “No se trata del cuando, sino del sí”. Con estas palabras respondía el CEO de Sony, Shuhei Yoshida, cuando fue preguntado sobre PS5 por Lorne Lanning, ingeniero del título Oddworld.

No se han sondeado fechas, ni tan siquiera hecho referencias a la potencia gráfica; simplemente se ha hablado de un posible “¿podría PlayStation 5 ofrecer algo distinto?”. Sony es consciente por una parte que Xbox Scorpio llevaría un paso más allá la fuerza bruta de PlayStation 4 Pro. Aunque la compañía japonesa tenga un increíble margen de venta sobre Xbox One, Sony no quiere quedarse descolgada.

Y por descolgada nos referimos precisamente a factores como el simple hecho de que Scorpio pudiera captar un mínimo la atención de sus fieles seguidores a PlayStation o inclusive que la propuesta jugable de Nintendo Switch en la que máquina tradicional y portátil se unen .

Es por ello que Sony no sólo barajaría aumentar la potencia de PlayStation 5 de forma exponencial con lo que a día de hoy podemos disfrutar en PS4 Pro; sino que además su manera de entender la marca cambiaría de forma radical a lo conocido hasta la fecha.

PSX, PS2, PS3 y PS4 son consolas de un éxito incuestionable, muchas de ellas reinas en sus correspondientes generaciones y que nos han dejado auténticas obras de arte. Además de estos datos, comparten otro elemento en común: son plataformas tradicionales. ¿Buscaría Sony el llevar por vez primera en su historia en la industria un giro de los acontecimientos en la manera de entender sus consolas de sobremesa?

Una cosa nos queda clara, dado el bagaje y éxito de Sony en el mercado de los videojuegos, la compañía nipona está en posición de atreverse a imaginar una máquina que opte en esta ocasión por algo diferente. Rivalizar con Xbox Scorpio puede ser más o menos asequible dada la velocidad a la que avanza la tecnología. ¿Puede decirse lo mismo con Nintendo y la gran base de creativos y diseñados de la empresa afincada en Kyoto?

No cabe duda que la que sería ya una batalla de próxima generación será cuanto menos interesante, en especial por comprobar si el debate técnico daría pie a otro que es igual de importante: la capacidad de sorprender al jugador.