Le pillaron jugando a Candy Crush en el Parlamento y responde con humor

Jugar a videojuegos en horas lectivas o incluso en horas de trabajo, es algo que no suele estar muy bien visto ya que, salvo que tu trabajo sea desarrollar, analizar o probar videojuegos, lo más probable es que lo hagas dejando tus responsabilidades a un lado. Y claro, que esto lo haga un cargo político es todavía más grave.

En España esto ya ocurrió en su día cuando Celia Villalobos se dispuso a jugar a Frozen durante un debate de política general, aún cuando ella estaba ejerciendo el cargo de vicepresidenta del Congreso. En otros países también a varios cargos políticos también se les ha descubierto jugando a Pokémon GO en medio de las sesiones plenarias de sus respectivos parlamentos.

Para defenderse, los políticos recurren a diferentes justificaciones. En el caso de Celia Villalobos explicó que era un juego que tenía encendido su nieta en la tablet, y que no estaba jugando, sino intentando cerrar la aplicación (aunque le llevase varios minutos esto). En otras ocasiones, cuando cargos políticos de otros países explicaron por qué estaban jugando a Pokémon GO, se esgrimieron razones tan atípicas como que lo hacían para "enviar un mensaje a un familiar" (aunque esto no sea posible en Pokémon GO) o que realizar tareas repetitivas como coger objetos en Poképaradas, ayuda a concentrarse. Y recientemente ha sido el turno de Malusi Gigaba, Ministro de Finanzas de Sudáfrica.

A Malusi Gigaba se le ha "cazado" jugando a Candy Crush en medio de una sesión plenaria, un hecho que ha sido muy criticado, pero que el propio político sudafricano ha querido atajar con humor. En una ocasión posterior, Malusi Gigaba aprovechó para bromear conque tendría que ir a rehabilitación para dejar su adicción al videojuego de King. Su frase produjo carcajadas en el parlamento de Sudáfrica, tal y como podéis ver en el vídeo que os mostramos en esta noticia.

Políticos hablando y jugando a videojuegos

En varias ocasiones hemos podido escuchar a políticos hablar de videojuegos, aunque no siempre con el mismo grado de atino. Alberto Garzón, de Unidos Podemos, comentó en alguna ocasión que Final Fantasy VII es su videojuego favorito, y que también ha jugado a títulos como Assassin's Creed o Alex Kidd. Por su parte, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, le hemos visto jugar a Wii Sports o incluso oirle decir que juega a FIFA con su hijo en Moncloa.

Sin embargo, no siempre las declaraciones de cargos políticos hacia videojuegos son igual de positivas. En el caso de Íñigo Errejón, el diputado de Unidos Podemos afirmó en su día que el atentado de Berlín no se habría hecho de la misma forma si no es porque el asesino "ha visto lo de Niza y porque ha visto videojuegos similares y en películas similares", palabras textuales.