Neox Games » Noticias » Análisis

Análisis

Luigi's Mansion 2

La serie Luigi's Mansion vuelve para que vivamos con el asustadizo hermano de Mario Bros una de sus aventuras alocadas cazando fantasmas por los rincones más oscuros del Reino del Champiñón.

Publicidad

El hermanísimo de Mario, ese popular personaje que nació con el único propósito de que en el Mario Bros original pudiesen jugar dos personas, ha tenido pocas oportunidades de mostrarse a lo grande. Sin embargo, cuenta con un gran apoyo por parte de los fans más acérrimos de Nintendo y de todas sus series de videojuegos clásicos.

Por eso, cuando a principios de siglo nació la videoconsola GameCube, sus padres le permitieron emanciparse de los juegos de su hermano y conquistar el mundo por él mismo con el más que interesante [[LINK:EXTERNO|||http://es.wikipedia.org/wiki/Luigi%27s_Mansion|||Luigi’s Mansion]].

Lamentablemente, y pese a que el juego no vendió mal, entró en el catálogo de una consola que no funcionó precisamente en ventas. Lo que le dejó siendo uno de los reyes de un catálogo que pocos jugadores llegaron a explotar debidamente.

Por ello, es todo un honor que Nintendo y el señor Shigeru Miyamoto en particular, se hayan decidido por fin en dar continuidad a la serie con una secuela que mejora lo visto y que aprovecha a más no poder las enormes posibilidades ofrecidas por la consola Nintendo 3DS.

El Profesor Fesor vuelve a tener problemas en su mansión: el Rey de los Boo ha roto en pedazos la luna oscura que mantenía a los fantasmas amistosos y a repartido los 6 pedazos en diferentes mansiones de la zona oscura del Reino del Champiñón. Nuestro objetivo, encontrarlos todos para que los fantasmas dejen de ser elementos hostiles.

Para ello tenemos un aspirador de fantasmas y dos linternas muy especiales. La primera nos servirá para abrir puertas o noquear enemigos, en forma de flash de cámara de fotos. La segunda para hacer reales los objetos que han pasado a ser invisibles. Nuestro aspirador nos permitirá capturar fantasmas, atraer objetos lejanos o, en su función inversa, alejar cosas, activar mecanismos o, incluso, inflar unos globos que conseguirán elevarnos en muchos momentos.

Los puzles, sin ser horriblemente simples, tampoco pueden presumir de ser complejos o de costar demasiado esfuerzo al jugador

El juego toma un rumbo interesante que evita el clásico plataformas que vinculamos a la familia fontanera ofreciéndonos algo, si cabe, más interesante: el de una especie de aventura gráfica por niveles y con estructura de plataformas, sin gran peso argumental, pero en el que en todo momento, además de acabar con los enemigos, tendremos que resolver infinidad de puzles. Las fases nos obligarán en todo momento a intentar conseguir todo lo necesario para llegar al lugar en el que se encuentra el pedazo de la luna oscura de cada mansión. Para ello, fase tras fase, y con una media de seis fases por nivel, tendremos que pasar por diferentes estancias, buscando llaves, partes de mecanismos o lo que en cada nivel sea preciso, normalmente, para abrir la puerta última que da al lugar en el que un jefe final custodia nuestro objetivo.

Por supuesto, cada misión está llena de objetivos secundarios (piedras preciosas que hay que coleccionar, boos ocultos) lo que, sin duda, es un gran aliciente para los completistas, que podrán a su vez meterse en modos online basado en retos en el que podrás jugar con personas de cualquier parte del mundo (no hay restricciones de zona).

En general, el juego es muy correcto: gráficos divertidos, coloristas… Las peleas con fantasmas son divertidas. Los puzles, sin ser horriblemente simples, tampoco pueden presumir de ser complejos o de costar demasiado esfuerzo al jugador.

Sin embargo, y pese a los molestos niveles (se repite en demasiadas ocasiones) en los que hay que perseguir a un perro por la mansión, recorriendo una y otra vez las mismas estancias (ojo, en estas fases es imprescindible el sonido, porque sin él es un infierno encontrar al maldito perro), esta nueva aventura es realmente divertida. Si no fuese porque actualmente existe un gran número de grandes títulos de gran calidad como éste para la consola de Nintendo, podríamos encontrarnos con uno de los mejores de su catálogo. Mientras tanto, y esperando otros pelotazos próximos como el remake de Donkey Kong Country Returns o Fire Emblem, sin duda es un auténtico imprescindible.

 

Publicidad