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Analizamos Kirby Triple Deluxe

Vive el triple de diversión con lo nuevo de Kirby

Os contamos qué nos ha parecido el regreso del pequeño Kirby en su aventura más colorida y preciosista, en exclusiva para Nintendo 3DS.

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Volvemos a las mismas de siempre: si no buscamos defraudar a la clientela habitual, lo normal, lo mejor que uno puede hacer, es aprender de todo lo que los compradores han aplaudido y volverlo a poner en el papel para crear un nuevo videojuego. Hay algunos a los que esto no se les da demasiado bien y se huelen desde lejos sus intenciones. Otros, como Nintendo, son auténticos expertos. Sí, son innovadores cuando quieren. Pero cuando les da por la vena continuista, son los mejores.

La prueba la tiene uno cuando pone Kirby Triple Deluxe en una Nintendo 3DS. Allí es cuando uno encuentra algo que, en alguna ocasión, le resultará pesado por ser endemoniadamente conocido, pero a lo que es difícil resistirse o decir que no. Una partida a Kirby siempre es una partida a Kirby. Y eso significa que el juego es la leche.

En Nintendo son innovadores cuando quieren. Pero cuando son continuístas, son los mejores

Parea empezar, tenemos el juego de esa pequeña bola rosa tragona con mejores gráficos, con mejor acabado y con mejor diseño de fondos que hemos visto. Los puzles, los retos y la jugabilidad en general, también están a la altura de las circunstancias. También tiene el toque nostalgia bastante bien cuidado. En este nuevo juego veremos todos los elementos que adoramos de la serie como, por ejemplo, sus incontables versiones del personaje, según que es lo que se haya comido anteriormente. Podremos ser espadachines, llenarnos de fuego, tener un látigo, campanero, escarabajo etc. Así hasta 25 habilidades, más el modo hipernova que nos permite hacer estragos con el escenario. Es espectacular cuando nos ponemos a absorberlo todo, incluso las pareces. Mucho, pero mucho más que cuando en el último juego de Yoshi nos poníamos a lanzar huevazos.

El juego, al igual que Yoshi's New Island es una versión hipermejorada de su respectivo original. Todo es preciosista, todo es cuidado, todo es mono y todo está lleno de color. Por supuesto, también supone un gran hándicap: sólo los que hayan pasado por decenas de juegos como él sabrán captar el mensaje y la esencia del personaje y de todo lo que le rodea. Si no eres acólito de la serie, lo que te encontrarás será una especie de juego simple de plataformas protagonizado por una bola rosa que absorbe cosas. Y eso, si no lo entiendes, puede ser realmente duro.

Por otro lado, mientras que el anteriormente mencionado Yoshi’s New Island pecaba enormemente de no saber utilizar las posibilidades de la consola 3D, esta aventura sí se muestra bastante más conforme con la tecnología de profundidad de campo. En este sentido, está mucho más en sintonía con Donkey Kong que con otros juegos en los que las 3D pasan despercibidas como New Super Mario Bros 2.

El sonido, por su parte, también está bastante a la altura del resto del juego. Melodías pegadizas, efectos made in Nintendo y demás complementos nos acompañarán de forma agradable en nuestras partidas.

Y, ahora, vamos con el Triple del título del juego. En esta ocasión se ha decidido incluir tres juegos por el precio de uno. El primero, que es el que hemos comentado durante todo el artículo, es el de la campaña de plataformas de toda la vida. Los otros dos son un poco curiosos.

Por un lado tenemos Combate Kirby. Es difícil explicar lo que nos encontramos dentro de este minujuego. Por un lado, es como una especie de pequeña demo de Smash Bros. Un pequeño juego de lucha en el que tendremos que enfrentarnos a diferentes personajes. Este minijuego, en principio, sirve para que podamos probar las diferentes cualidades de Kirby y veamos cómo controlarlas y sepamos cuál es más eficaz. No es un juego completo, no es un argumento de compra, pero está bien.

El último, Redoble de Dededé, aparentemente es como una especie de pequeño minujuego, capaz sólo de salir por si mismo en un soporte tipo Smartphone. Se trata de un pequeño juego musical en el que tendremos que llegar de principio a fin de un recorrido saltando en tambores. Nuestra misión es la de realizar saltos pequeños, medianos o grandes según lo requiera el recorrido. Y, todo, siguiendo el ritmo de la música. El juego, explicado, parece muy tonto. Pero en la práctica… Bueno, en la práctica también lo es. Pero es condenadamente difícil y, bueno, esas cosas hacen que uno se pique y se pique, y lo intente, y lo intente… Y al final, pese a ser un pequeño minijuego, terminas jugando más horas que al básico.

Después de habernos deleitado con el maravilloso Kirby Epic Yarn, parecía que nada mejor podía pasar en la vida de esta bola de chicle con patas. Y, sin embargo, se mantiene sano y fuerte, y redescubre todo su encanto en portátil. Ahora, después de haber rescatado a Mario, a Yoshi, a Zelda, Luigi, Kid Icarus, Donkey Kong y Pikachu, ya no sabemos qué le falta por revivir al catálogo de Nintendo 3DS. Bueno, sí lo sabemos… Falta un buen Metroid… Pero eso es otra historia.

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