PARA MÓVILES
Así es #SelfCare, el título creado para los que no les gustan los videojuegos
El estudio TruLuv sorprende con esta propuesta en la que es imposible perder, siendo su principal mecánica la de relajarnos y disfrutar de la experiencia.
¿Quién dice que los desarrolladores no piensan también en aquellos a los que no les gustan los videojuegos? Y no hablamos precisamente de gente que se dedica a despotricar contra la industria, sino que no se sienten atraídos por los diversos títulos disponibles a pesar del amplísimo rango de géneros que es capaz de cubrir a día de hoy, ya sea deportes, aventuras gráficas, puzzles e incluso simuladores de lo más original.
Es aquí donde entra en acción TruLuv, un estudio en el que veteranos de la saga Assassin’s Creed como Brie Code, junto a escritores de la talla de Eve Thomas han dado forma a un proyecto que no tiene otra meta que la de ganarse el corazón de aquellos que no disfrutan de los de los videojuegos. ¿Cómo? Os lo vamos a mostrar.
#SelfCare es su idea para llegar al público menos ducho en la industria del videojuego. Para ello han creado un título en el que primero y principal no se puede perder. No hay puntuaciones, enfrentamientos con otros jugadores o jefes finales. #SelfCare es un videojuego en el que entras para relajarte, disfrutar plácidamente de su experiencia y que no requiere para nada una dedicación tan siquiera mínima.
Disponible para Android a través de GooglePlay e iOS en AppStore, en #SelfCare no tendremos otra cosa que hacer que dar vueltas en la cama, acariciar al gato y simplemente relajarnos pero sin salir de la cama. Es lógico pensar que a los jugadores más avezados y expertos la idea les parezca aburrida, pero es importante recalcar que sus desarrolladores trabajando en este título pensando en aquellos que no se acercan a los videojuegos y con el fin de transmitir sensaciones como relajación o simple y llanamente, hacer sentir mejor al usuario a través de los sentimientos que la obra pueda darnos.
Tal y como han destacado también desde Kotaku, no tardaremos en darnos cuenta de que las mecánicas son escasas, casi nulas, pero son las emociones que transmite lo que en palabras del medio “hace que no quiera desinstalarlo. A los 5 o 10 minutos estarás aburrido, pero lo tendrás en tu smartphone como una habitación privada que te hace sentir bien”. Una propuesta curiosa como pocas y que demuestra que incluso el más sencillo de los videojuegos puede llegar a cualquier tipo de jugador, sea asiduo o no a la industria.