Análisis
X-Men: Destiny
Toma el control de un nuevo mutante y elige si aliarte con Cíclope y los X-Men o con Magneto y sus Hermandad de Mutantes Diabólicos.
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Los mutantes y la humanidad están llegando a un encuentro. Aunque, obviamente, en los dos bandos hay elementos que están en contra de la paz. Por un lado, existe una especie de grupo terroristas, Los Purificadores, que quieren que la raza humana acabe con todos los mutantes del mundo. De forma que se acabe la evolución del Homo Sapiens al que tanto odian. Por otro lado, la Hermandad de los Mutantes Diabólicos de Magneto quieren justo lo contrario: un mundo sin eslabones débiles, sin piezas que sobren en el puzzle. En medio de un discurso en el que los mutantes y los humanos parecen estar en sintonía, comienza la catástrofe. Nosotros, en esta situación, tendremos que elegir entre personajes diferentes, cada uno con una historia, con un pasado, y tendremos que darle un futuro. Y, una vez en ese punto, veremos cómo suceden las cosas, como transcurre la historia, siempre trastocada por las decisiones que vayamos tomando durante toda la partida.
Lo que tenemos delante de nuestras narices, X-Men: Destiny, más que un juego de rol (aunque se vende como tal) es una especie de Infamous con personajes de Marvel. El juego, en principio lineal, se va moviendo por ramas simples, dejándonos elegir entre mucho blanco y negro.
En principio, sólo tendremos que tomar decisiones simples, como qué tipo de poderes queremos para nuestro personaje, o que habilidades vamos apuntando a cada uno de los botones del mando. Estas habilidades van desde el ataque a la defensa o el salto. Cada una de estas habilidades vienen determinadas por otras habilidades de personajes del universo mutante de Marvel. De esta forma, podemos tener la protección de Coloso, las facultades de curación de Lobezno o los ataques de Jurggenaut.
Tanto los poderes especiales, que pueden ser de materia oscura o de energía, como las habilidades, pueden ser mejoradas según recojamos orbes de los enemigos caídos. En este sentido, el sistema que encontraremos será similar al utilizado por God of War, con mejoras por nivel que se comprarán por cantidad de orbes recogido. También de las aventuras de Kratos encontraremos baúles de los que podremos coge vida y poder mutante repartidos por el mapa.
El juego, por lo tanto, es lineal, pero con bifurcaciones. Cada misión nos llevará a un punto en el que tendremos que volver a decidir si tirar por el lado mutante bueno o por el lado malo. Normalmente, esa decisión vendrá dada por la aparición de un secundario, de cualquiera de los dos bandos. Tendremos que marcar, ayudándolos o no, cuál es nuestra filiación, hasta que, finalmente, acabemos ingresando en una de las dos causas.
X-Men: Destiny es una especie de Infamous con personajes de Marvel
El juego no es demasiado largo, no es complicado. Su nivel técnico no es tampoco muy alto, aunque muchos de sus defectos los intenta pulir con un acabado visual que imita ligeramente el toque cómic. Aunque, en todo caso, no es un efecto demasiado marcado, y no consigue ocultar el aspecto inacabado del producto. En muchos momentos, el juego se pierde en explicaciones, en charlas de los personajes. En esos momentos, el juego puede llegar a cansar, ya que la primera hora de experiencia se convierte en una constante charla para marcarnos los programas electorales de cada bando. A partir del primer tercio de este juego, ya habremos tomado un camino claro y, poco a poco, se permitirá que avancemos en la trama, sin entretenimientos burdos de parte de los no jugadores.
Por supuesto, el juego no cuenta con la profundidad y la gracia de otros grandes, más roleros y divertidos, como Xmen Legends. Pero el toque de acción, que en los niveles altos es bastante más sofisticado e interesante que al principio del juego, hacen que se nos quite un poco el sabor soso de boca que tenemos en las primeras horas.
Para que nos hagamos una idea, no es el mejor juego de superhéroes del mundo. Pero no piensa serlo. Tiene los suficientes guiños y homenajes a los mutantes que necesitamos los más frikis para sentirnos arropados y a gusto. Pero, por supuesto, esto no ser suficiente para los que, simplemente, quieren un buen juego, bien acabado, y con todo lo que debe tener un juego (originalidad, gráficos, historia)... Los que busquen todo eso, que miren por otro lado. Tal vez en Gotham encuentren algo así. Por aquí sólo hay muties. Y sólo los muy fans sabrán apreciarlo del todo.
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