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Análisis

Fight Night Champion

La saga de boxeo por excelencia se expande con su secuela más cinematográfica vista hasta la fecha. Prepárate para conocer los más bajos fondos del mundo del cuadrilátero.

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Los juegos deportivos nos meten dentro de los cuerpos de grandes estrellas, de futras leyendas, de auténticos titanes de la actualidad. Les usamos, nos sentimos bien a sus costas, pero les dejamos apartados a la primera de cambio. ¿Qué será de sus vidas? ¿Tendrán anhelos, sueños, temores? ¿Habrá sido duro su camino para llegar a lo más alto? ¿O habrá sido todo un camino sembrado de rosas y algodoncillos?

En deportes como el fútbol, el interés por la vida de los jugadores, es bastante nulo: chico sin estudios que llega a lo más alto dando patadas a un balón y se retira a los 30 años, por viejo y con un riñón a medio gas. La historia se repote en tantas otras disciplinas, en las que todo consiste en jugar y, si hay suerte, ganar dinero.

Pero, ¿y en deportes de lucha como el boxeo? ¿Cómo sería vivir la vida de un boxeador, tanto dentro del ring, como fuera de él?

El mundo del cuadrilátero ha sido protagonista de grandes películas, como Toro Salvaje, de Martin Scorsese. Y, como tal, también es una buena base para contar algo más que lo que sucede entre el gong y el K.O. Porque, si hay algo más emocionante que pelear en un ring por un título mortal, es hacerlo por nuestra propia vida, o por la de los seres a los que más queremos.

El aura de perdición, suciedad y bajos fondos que acompañan a los púgiles desde hace años es algo misterioso y atractivo. Y, como tal, EA Sports ha pensado que, teniendo el mejor título de Boxeo de la historia, Fight Night, era una buena idea convertir su producto en una revolución del género.

En esta nueva entrega nos encontramos gráficos alucinantes, jugabilidad conseguidísima, grandes estrellas y un guión que lo hila todo

En ediciones anteriores habíamos encontrado un nivel altísimo en lo que a representación del deporte rey de lucha se refiere. Fight Night 3 mostraba unos gráficos híper-realistas que rozaban lo espectacular. También conseguía una mejora sustancial en el modo de juego, mostrando opciones que creaban una sensación de simulación hasta la fecha nunca vistas en un juego de boxeo.

Fight Night 4 mejoraba lo presente ligeramente, pero además, conseguía mitificar el deporte, permitiendo reproducir peleas clásica del boxeo o generar eventos imposibles como el que ponía en el ring a luchadores de la talla de Mohamed Ali  frente a otros no contemporáneos como Mike Tyson.

En esta nueva entrega nos encontramos todo lo anterior: gráficos alucinantes, jugabilidad conseguidísima, grandes estrellas del boxeo y, por primera vez, un guión que lo hila todo.

Sí, podemos jugar como siempre. Podemos crear nuestro propio jugador, competir online, crear nuestra propia leyenda. Pero también nos podemos meter en un guión realmente sugerente, que nos lleva a través de la vida, llena de altibajos, de una figura de boxeo. Un chico que tuvo comienzos humildes, que llegó alto, pero que no supo mantener el estatus sin acabar en el pozo de la perdición. Y, una vez lleguemos a lo más hondo, tendremos que volver a levantar cabeza y conseguir la eterna redención.

Por supuesto, que un juego de deportes nos cuente una historia, no es algo imprescindible. Sin embargo, el chorreo de medios que pone en cada título EA Sports hace que la experiencia sea interesante. Cada combate tiene el aliciente de contar una porción más de nuestra tortuosa vida. Los vídeos, están creados con gran pulso y sentido narrativo. Y, bueno, el juego sigue siendo rematadamente bueno con ellos como lo sería sin ellos.

Es una idea buena y que esperemos se convierta en una opción más a incluir en otros títulos deportivos. Le da un pequeña sentido más que hace que nos encariñemos más con ese pedazo de carne sintética que nos ha tocado interpretar.

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