Lord of Arcana

El argumento de Lord of Arcana nos introduce en un mundo mágico en el que todo poder reside en una piedra que, obviamente, todo el mundo espera obtener.

A partir de ahí, y sin que las líneas argumentales sean realmente importantes, nos encontramos con uno de los últimos grandes título que saldrán para la actual portátil de Sony. En un momento en el que todo el mundo parece haberla abandonado a su suerte, Square Enix saca todos sus recursos adelante para ofrecer una fastuosa despedida de ella.

El juego en sí nos muestra una especie de mezcla de géneros realmente interesante. Por un lado, todo apunta a que nos encontramos frente a frente a un Final Fantasy de pleno derecho. El componente de rol, el tipo de personajes, el mundo por el que nos movemos. También es similar el hecho de que las peleas que vamos a mantener se produzcan fuera del propio mapa. Esto significa, vemos al monstruo, nos enfrentamos a él (si nosotros comenzamos la trifulca nos dan ventaja) y el juego nos traslada a un círculo mágico en el decorado en el que nos encontrábamos, para que acabemos ahí con nuestros enemigos.

Al contrario que en FF, en Lord of Arcana la pelea es directa. Tendremos que tener bien claras nuestras habilidades y nuestras armas para ponernos a luchar contra ese ser que tenemos delante de nuestras narices.

En este aspecto el juego se parece más a Kingdom Hearts, pero utilizando un ring especial en lugar de  pelear directamente en el lugar en el que nos encontrábamos.

Lord of Arcana es preciosista ytiene una música a la altura de lo esperado por un lanzamiento de Square Enix

Por último, el juego entra de lleno en el sistema de jefes finales. Aquí, más parecido a un Monster Hunter, tendremos que llegar a un monstruo final y deberemos ingeniárnoslas para conseguir acabar con sus esperanzas de vida en unos minutillos. Para ello, como no podía ser de otra forma, tendremos que seguir los pasos básicos: sabernos todos los combos disponibles de memoria, tener actualizado nuestro arsenal y sólo ir a los grandes combates cuando estemos realmente preparados para ello. Con esto nos referimos a que no merece la pena ir a partirnos la cara con el gran jefe hasta que nuestro nivel no sea lo suficientemente alto como para ganar sobradamente.

El juego es preciosista, es grande, tiene una música a la altura de lo esperado por un lanzamiento de Square Enix. Todo roza la perfección más absoluta, siempre teniendo en cuenta las actuales limitaciones de una máquina como la PSP.

Por supuesto, se nota el sello “producto facturado para el mercado japonés” en cada segundo que lo tengamos. Y, pese a estar al nivel tecnológico más alto que puede estar un título de PSP, se le notan unas deficiencias que hacen que parezca, hoy, un juego de ayer. Sin embargo, y teniendo en cuenta que estamos bastante faltos de buenos lanzamientos para la portátil de Sony, Lord of Arcana es más que una adquisición recomendada. Es un pequeño adelanto del auténtico canto del cisne que veremos en los próximos meses, previo al lanzamiento de la sustituta de la PSP.